Un país de encanto para los eventos
La película Encanto, ganadora en la categoría a mejor película animada en los premios Oscar, exhibe el poder musical de Colombia irradiado en escenas que bien se ajustan a las experiencias que ofrece el país en turismo de reuniones.
Los ritmos diversos y pegajosos que hacen bailar a todos, la abundancia en la comida, los paisajes de ensueño conformados por ríos llenos de color, las montañas cafeteras, los animales del trópico, las llanuras, los bosques y las flores, las quebradas y las estrellas, son algunas de las postales colombianas proyectadas en una película que recoge esas vivencias que resultan atractivas para los organizadores de eventos luego de meses de aislamiento.
“Nos sentimos muy orgullosos de que esta producción de Disney se haya inspirado en la inagotable riqueza que tiene Colombia en términos culturales y de biodiversidad y además de la calidez y amabilidad de su gente. Sin duda, esta es una oportunidad única que nos permitirá fortalecer la imagen de Colombia a nivel internacional, con el fin de seguir llevando nuestro mensaje acogedor a todos los rincones del mundo y así aumentar el interés de millones de viajeros hacia nuestro país”, dice Flavia Santoro, presidenta de ProColombia.
En Encanto está, por ejemplo, el Valle de Cocora, ese soberbio paisaje colmado de palmas de cera -el árbol nacional de Colombia- ubicado en el Paisaje Cultural Cafetero y que permite recorridos vibrantes en jeeps Willys o caminatas de los participantes de los viajes de incentivo.
La película muestra las mariposas amarillas, uno de los símbolos representativos de la literatura de Gabriel García Márquez que también vuelan en los mariposarios icónicos del país adonde pueden ir los visitantes a vivir una jornada inolvidable: el Jardín Botánico del Quindío, el Jardín Botánico José Celestino Mutis, de Bogotá, o La Casa de la Mariposas en Medellín.
En diversos pasajes suenan los acordeones, el instrumento de Colombia que se relaciona con sus ferias y fiestas, sobre todo en la costa Caribe donde ambientan bodas, dan bienvenidas a los viajeros, despiden solteros, ofrecen serenatas y encienden los bailes a ritmo de vallenatos.
La cultura de afrodescendientes y palenqueros de la costa Caribe de Colombia aparece en la película a través de las frutas tropicales, que en Cartagena son ofrecidas por las mujeres de Palenque en bandejas que se sostienen en un nido sobre sus cabezas. Pensando en los viajes de incentivos, la ciudad brinda planes para comer frutas exóticas y frescas y disfrutar de la sonrisa de las mujeres palenqueras.
Y como Colombia es un país donde todo encuentro de cuatro o más personas tiene grandes posibilidades de volverse una rumba, en los bailes de Encanto se aprecian los movimientos propios de la salsa que se baila en el Valle del Cauca. Los organizadores de eventos pueden incluir en las agendas de viajes, clases baile con maestros expertos.
Encanto es, en fin, la película que celebra la cultura colombiana y que también muestra la oferta del país para la industria de reuniones.